Los órganos, especialmente los Zang (órganos Yin), se reflejan en el abdomen. Un desequilibrio orgánico se mostrará en la pared abdominal con cambios de temperatura, tensiones musculares de tipo protección a la palpación, zonas prominentes o hundidas, cambios en la coloración, presencia de nódulos o bultos.
El abdomen aparece reflejado en el Nan Jing como un sistema de valoración tradicional, sin embargo este sistema entro en desuso con el tiempo, puesto que China entró en una fase de puritanismo en la cual no se veía con buenos ojos tocar el abdomen.
Sin embargo en otros países como Japón, donde incluso los baños eran públicos y mixtos, se desarrollo especialmente la habilidad de palpación abdominal. De hecho este sistema es la base para realizar la conocida como terapia de meridianos "Keiraku Chiryo" para reequilibrar los desequilibrios según la acupuntura japonesa.
"Un sistema confiable"
Este sistema es uno de los más confiables puesto que es menos sensible a la subjetividad que otros sistemas de valoración como puede ser la pulsología entre otras. Nada más lejos que dar a entender que la pulsología no es un sistema válido, todo lo contrario, sin embargo es un sistema complejo de aprender pero aún más complicado de dominar con plenas garantías. Esto hace que ante una misma palpación del pulso, diferentes acupuntores ofrezcan fácilmente valoraciones diferentes. De hecho en la terapia de meridianos "Keiraku Chiryo" también se usa el pulso.
El abdomen puede darnos una idea clarificadora de los Zang implicados en el desequilibrio, así como aplicar con criterios objetivos una acupuntura enfocada a regular los desequilibrios identificados mediante este sistema.
Este sistema garantiza que cuando lo aplicamos, haga que el sistema energético tienda al equilibrio ofreciendo mayor posibilidades de éxito que si no entrásemos en el terreno de la regulación previa.
El abdomen es un interesante microsistema acupuntural tanto de valoración (o diagnóstico) como de regulación, que gracias a los trabajos de Sodo Okabe y Keiri Inoue pudo rescatarse del olvido.
"El sistema nervioso entérico, nuestro segundo cerebro"
En los intestinos tenemos el que se conoce como sistema nervioso entérico, donde se encuentran más neuronas que en la médula espinal, capaz de segregar neurotransmisores y tomar decisiones independientes de nuestro cerebro. Esto puede mucho que ver con la importante relación de los Zang con el abodomen, como con la efectividad de la acupuntura abdominal.
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